Magdalenas Caseras, receta nostálgica
Las magdalenas caseras son mucho más que un simple dulce; son una verdadera conexión con la tradición, la familia y los recuerdos más entrañables. Este postre, con su característico aroma a limón y su textura esponjosa, evoca momentos de infancia y reuniones familiares en torno a la mesa. Hoy te invito a preparar estas magdalenas que, con ingredientes sencillos, te transportarán a tiempos más simples y felices.
Ingredientes
Para las magdalenas
- 3 huevos
- 200 g de azúcar
- 250 ml de leche
- 200 g de aceite de oliva suave
- 350 g de harina
- 1 sobre de levadura química (16 g)
- Ralladura de ½ limón
- 1 pizca de sal
Elaboración de las magdalenas caseras
1. Prepara la Masa
En un bol grande, bate los huevos junto con el azúcar hasta obtener una mezcla suave y espumosa. Puedes utilizar una batidora eléctrica para facilitar el proceso, aunque hacerlo a mano también es una opción. A continuación, agrega la leche y el aceite de oliva suave, mezclando bien hasta que todos los ingredientes se integren de manera uniforme.
Tamiza la harina junto con la levadura química y la pizca de sal, e incorpóralas a la mezcla líquida poco a poco. Añade la ralladura de limón para darle ese toque fresco y aromático que caracteriza a las magdalenas. Mezcla todo hasta conseguir una masa homogénea y sin grumos.
2. Reposa y Hornea
Precalienta el horno a 220°C. Mientras tanto, llena los moldes para magdalenas hasta aproximadamente ⅔ de su capacidad con la masa preparada. Deja reposar la masa en los moldes durante 15-20 minutos. Este descanso es crucial para que las magdalenas adquieran ese característico copete que las hace tan especiales.
Hornea las magdalenas a 220°C durante los primeros 8-10 minutos para darles un buen empuje inicial. Luego, reduce la temperatura a 180°C y continúa horneando durante 15 minutos más, o hasta que las magdalenas estén doradas y cocidas por dentro. Retíralas del horno y deja que se enfríen antes de servir.
Consejos para unas magdalenas caseras perfectas
- Variedad en el Sabor: Si deseas personalizar tus magdalenas, puedes agregar pepitas de chocolate, frutos secos, o incluso un toque de mermelada en el centro antes de hornear.
- Para un Copete Perfecto: Asegúrate de no batir en exceso la masa después de añadir los ingredientes secos. Esto ayuda a retener el aire, lo que contribuye a que las magdalenas suban de manera uniforme.
- Horneado Eficiente: Evita abrir el horno mientras las magdalenas se están horneando, ya que el cambio de temperatura puede hacer que el copete no se forme adecuadamente.
¡Y ahí lo tienes! Unas magdalenas caseras que no solo deleitarán tu paladar, sino que también te recordarán esos momentos especiales compartidos en familia. Disfrútalas en el desayuno, en la merienda, o en cualquier momento del día.
¡Seguro que se convertirán en un clásico en tu hogar! Esperamos que esta receta te haya gustado y te esperamos en las siguientes.
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