Hoy te enseñamos a preparar las tradicionales albóndigas suecas, conocidas como köttbullar. Este plato típico de la gastronomía nórdica es famoso por servirse con una deliciosa salsa cremosa, acompañado de puré de patatas y, en ocasiones, con salsa de arándanos.

Ingredientes

  • 300 gramos de carne picada de ternera
  • 100 gramos de carne picada de cerdo
  • 2 cucharadas de pan rallado
  • 1/2 cebolla picada finamente
  • 1 huevo
  • 4 cucharadas de aceite de oliva
  • 1 cucharada de harina
  • 100 ml de leche
  • Sal al gusto
  • Pimienta negra al gusto
  • Cebollino fresco picado para decorar
Las mejores albóndigas suecas caseras

Elaboración de las albóndigas suecas

  1. Preparación de la Mezcla de Albóndigas: Pela y pica finamente la cebolla. En un bol grande, combina la carne de ternera y cerdo con la cebolla picada, el pan rallado, el huevo, sal y pimienta al gusto. Mezclar bien hasta que la masa sea homegenea. Formar las albóndigas con las manos.
  2. Cocción de las Albóndigas: Calienta el aceite de oliva en una sartén a fuego medio. Fríelas hasta que estén doradas por todos lados. Una vez cocidas, retíralas y resérvalas en un plato.
  3. Preparación de la Salsa: En la misma sartén, con el aceite utilizado para freír las albóndigas, añade la harina y cocina hasta que se dore. Luego, incorpora la leche poco a poco, removiendo constantemente para evitar grumos. Cocina la salsa a fuego lento hasta que espese, y sazona con sal y pimienta al gusto.
  4. Integración y Presentación: Regresa las albóndigas a la sartén con la salsa y cocina durante unos 2 minutos más para que absorban bien el sabor. Sirve las albóndigas acompañadas de puré de patatas y decora con cebollino fresco picado.
Receta de albóndigas suecas caseras

Consejos para unas albóndigas suecas perfectas

  • Versión Baja en Calorías: Si prefieres una opción más ligera, puedes hornear las albóndigas a 220°C hasta que estén doradas en lugar de freírlas.
  • Almacenamiento: Puedes congelar las albóndigas con salsa en un recipiente hermético o simplemente congelar las albóndigas sin la salsa y envasarlas al vacío para conservar su forma.
  • Alternativas Sin Gluten: Si eres celíaco, sustituye el pan rallado por coco rallado o polvo de nuez. Esto no solo mantiene la textura jugosa, sino que también añade un toque especial al sabor.

Ahora ya sabes cómo preparar unas auténticas albóndigas suecas que transportarán tu paladar a los fríos paisajes nórdicos. Son perfectas para disfrutar en una cena acogedora. Esperamos que esta receta os haya gustado y os esperamos en las siguientes.

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