Si hay un restaurante en Santander donde el producto es el auténtico protagonista, ese es Marucho. Situado a pocos pasos del puerto, este clásico de la ciudad cántabra lleva décadas siendo referencia para quienes buscan buena cocina, tradición y sabor sin adornos. Aquí no encontrarás florituras: lo que hay es marisco fresco, pescado del día, guisos de siempre y platos que hablan de origen, territorio y respeto por la materia prima.

Y lo mejor es que cada visita a Marucho es diferente, porque depende de lo que ese día ha traído el mar.

Los imprescindibles de restaurante Marucho en Santander:

Aunque la carta varía según la temporada y la lonja, hay platos que destacan por su sabor, sencillez y fidelidad al producto:

Nécoras, centollo y mejillones

Cuando se habla de marisco fresco en Santander, Marucho es parada obligatoria. Las nécoras cocidas en su punto, el centollo lleno y sabroso o los mejillones al vapor muestran por qué este restaurante es uno de los favoritos de locales y visitantes.

Zamburiñas, ostras, almejas y navajas

El marisco más fino también tiene aquí su lugar. Las zamburiñas a la plancha, las ostras abiertas al momento, las almejas en salsa verde o las navajas ligeramente marcadas con aceite y ajo son platos que elevan la experiencia sin necesidad de más que una buena copa de vino blanco.

Bocartes y pulpo: tradición del norte

No todo son crustáceos. Entre los clásicos que nunca fallan están los bocartes fritos, dorados por fuera y jugosos por dentro, y el pulpo, tierno y sabroso, servido al estilo tradicional, con aceite de oliva virgen extra y un punto de pimentón.

Pescado del día a la plancha

Si te preguntas qué pescado pedir en Marucho, la respuesta es sencilla: el que tengan ese día. Dorada, lubina, rodaballo, merluza o lenguado… todo cocinado en su punto justo, sin salsas que escondan el sabor del Cantábrico. Porque aquí, el pescado es fresco de verdad.

Ensalada de tomate con ventresca y pimientos asados

Para acompañar, no hay que perderse dos clásicos de la casa: la ensalada de tomate con ventresca, con ingredientes de calidad y aliño equilibrado, y los pimientos asados, suaves y dulces, que son el contrapunto perfecto a cualquier pescado o marisco.

Comer como se ha comido siempre (y sin reservas)

Una de las características de Marucho es que no acepta reservas. Funciona por orden de llegada, como los bares y restaurantes de toda la vida. Y, aunque eso pueda implicar una pequeña espera, quienes lo conocen saben que vale la pena. Además, el servicio es rápido, atento y con ese aire de casa que hace que el tiempo pase más deprisa entre barra, cañas y conversación.

¿Dónde está Marucho y por qué no puedes perdértelo?

Marucho se encuentra en Calle Tetúan, 21, uno de los barrios con más tradición gastronómica de Santander. Su cercanía al mar, a la bahía y al ambiente local lo convierten en el lugar ideal para una comida sin pretensiones, pero con alma.

Tanto si eres de los que busca marisco y pescado fresco en Santander, como si simplemente quieres comer bien en un restaurante tradicional sin caer en lo turístico, Marucho es un acierto seguro.

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