Pollo a la cerveza, receta fácil
El pollo a la cerveza es un plato clásico de la cocina casera que combina la jugosidad del pollo con el sabor robusto de la cerveza. Es una receta reconfortante y llena de sabor que se puede adaptar fácilmente a los gustos personales y a los ingredientes disponibles.
Ingredientes para 4 personas
- 4 pechugas de pollo (sin piel y deshuesadas)
- 2 cucharadas de aceite de oliva
- 1 cebolla picada
- 2 dientes de ajo, picados
- 1 zanahoria grande, cortada en rodajas
- 1 tallo de apio, cortado en rodajas
- 200 ml de cerveza (preferiblemente una cerveza de sabor robusto)
- 200 ml de caldo de pollo
- 2 cucharadas de salsa de tomate
- 1 cucharadita de tomillo seco
- 1 cucharadita de romero seco
- Sal y pimienta al gusto
Preparación del pollo a la cerveza
- Preparar las pechugas de pollo: Comienza secando las pechugas de pollo con papel de cocina para eliminar el exceso de humedad. Luego, sazona ambos lados de las pechugas con sal y pimienta al gusto. Este paso ayudará a que el pollo tenga un sabor más uniforme y retenga su jugosidad durante la cocción.
- Dorar el pollo: En una sartén grande o una cazuela con fondo grueso, calienta una cucharada de aceite de oliva a fuego medio-alto. Una vez caliente, coloca las pechugas de pollo en la sartén y dóralas por ambos lados hasta que estén bien doradas y se forme una costra caramelizada, esto debería tomar aproximadamente 3-4 minutos por cada lado. Al dorar el pollo, asegúrate de no sobrecargar la sartén para permitir un dorado uniforme y crujiente.
- Preparar la base de la salsa: Retira las pechugas de pollo doradas de la sartén y colócalas en un plato aparte. En la misma sartén, agrega la otra cucharada de aceite de oliva. A continuación, añade la cebolla picada, el ajo picado, las zanahorias en rodajas y el apio en rodajas. Cocina las verduras, removiendo ocasionalmente, hasta que estén tiernas y ligeramente doradas, esto tomará aproximadamente 5-6 minutos.
- Desglasar con cerveza: Una vez que las verduras estén cocidas, es momento de agregar la cerveza a la sartén. Vierte la cerveza lentamente sobre las verduras, revolviendo constantemente para soltar cualquier trozo dorado pegado en el fondo de la sartén. La cerveza añadirá un sabor único y aromático al plato. Lleva la mezcla a ebullición y a continuación reduce el fuego a medio-bajo.
- Agregar salsa de tomate y hierbas: Después de desglasar con la cerveza, incorpora la salsa de tomate a la sartén. Revuelve bien para combinar todos los ingredientes y deja que la mezcla vuelva a hervir. A continuación, agrega el tomillo seco y el romero seco a la salsa. Estas hierbas aromáticas añadirán profundidad de sabor y complejidad al plato.
- Regresar el pollo a la sartén: Una vez que la salsa esté bien combinada y haya vuelto a hervir, coloca las pechugas de pollo doradas nuevamente en la sartén. Asegúrate de sumergir parcialmente las pechugas en la salsa para que absorban todos los sabores durante la cocción. Si es necesario, ajusta el nivel de líquido en la sartén para que las pechugas estén cubiertas hasta la mitad.
- Cocinar a fuego lento: Vierte el caldo de pollo sobre el pollo y la salsa en la sartén. Lleva la mezcla nuevamente a ebullición, luego reduce el fuego a bajo. Cubre la sartén con una tapa ajustada y cocina a fuego lento durante 25-30 minutos, o hasta que el pollo esté completamente cocido y tierno, y la salsa se haya reducido y espesado ligeramente. Cocinar a fuego lento permitirá que los sabores se mezclen y se intensifiquen, resultando en un plato más sabroso y reconfortante.
- Servir: Una vez que el pollo esté cocido, retira la sartén del fuego y destapa con cuidado. Sirve el pollo caliente, acompañado de la salsa de cerveza y verduras. Puedes decorar el plato con un poco de perejil fresco picado para darle un toque de color y frescura adicional.
Con qué acompañar el pollo a la cerveza
El pollo a la cerveza se puede acompañar con una variedad de platos complementarios para una comida completa y satisfactoria. Algunas opciones populares incluyen:
- Puré de patatas cremoso: El puré de patatas es el acompañamiento clásico para el pollo a la cerveza, ya que su textura suave y cremosa contrasta perfectamente con la carne tierna del pollo.
- Verduras asadas: Las verduras asadas, como zanahorias, patatas y cebollas, son una opción saludable y deliciosa que complementa muy bien el sabor del pollo a la cerveza.
- Ensalada fresca: Una ensalada fresca y crujiente es una opción ligera y refrescante que equilibra la riqueza del pollo a la cerveza, proporcionando un contraste de sabores y una variedad de nutrientes.
- Pan crujiente: Un pan crujiente, como baguette o pan de campo, es perfecto para mojar en la deliciosa salsa de cerveza y limpiar el plato.
- Arroz blanco: El arroz blanco es una opción sencilla y versátil que absorberá los deliciosos sabores de la salsa de cerveza. Además, cocina el arroz al vapor o en una olla con caldo de pollo para un toque extra de sabor.
Con estas sugerencias, podrás disfrutar de una comida deliciosa y satisfactoria con tu pollo a la cerveza casero. ¡Buen provecho!
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