Focaccias artesanas y cócteles en Santander | Bello Bello
Descubre cómo se elaboran las focaccias artesanas de Bello Bello: masa casera, ingredientes italianos y maridaje con cócteles en Santander.
Imagina que entras en un restaurante y el aroma a pan recién horneado te recibe como una promesa. Es ese instante en el que sabes que vas a comer bien, que lo que está por venir ha sido preparado con tiempo, con técnica y con un profundo respeto por el sabor. En pleno centro de Santander, Bello Bello ha convertido esa escena en su sello de identidad. Y desde HosteleriaSantander.com hemos querido descubrir qué hay detras de sus ya famosas focaccias artesanas.
Un concepto italiano reinterpretado en Santander
Bello Bello no es un restaurante italiano al uso. Es una experiencia que combina cocina tradicional, un entorno moderno y una carta de cócteles en Santander que está dando mucho de qué hablar. Pero si hay un protagonista absoluto en su cocina, ese es el pan. Y más concretamente, la focaccia.
Inspirada en la clásica receta de la Liguria italiana, las focaccias artesanas de Bello Bello se elabora cada día con masa casera, aceite de oliva virgen extra, harina seleccionada y fermentación lenta. Nada industrial, todo artesanal. El resultado es una base aireada, suave, crujiente por fuera y cargada de sabor.
El proceso: de la masa al horno de piedra
Cada focaccia que llega a la mesa comienza mucho antes de que se encienda el horno. En Bello Bello se trabaja la masa desde primera hora de la mañana. El secreto está en los tiempos de reposo, la técnica de amasado y la humedad justa que permita una textura equilibrada entre lo esponjoso y lo crujiente.
Tras su primera fermentación, la masa se estira y se deja reposar nuevamente. Luego, se hornea en piedra, lo que permite una cocción uniforme y una base con ese dorado tan característico. Solo entonces se incorpora el resto de ingredientes, en combinaciones que rinden homenaje a la cocina italiana más sabrosa.
Focaccias que enamoran al primer bocado
La carta de focaccias de Bello Bello es breve pero contundente. Cada una de sus propuestas está pensada para sorprender, equilibrar sabores y aprovechar ingredientes de calidad.
- Focaccia de mortadela trufada y stracciatella: un clásico reinventado con ese toque de trufa que potencia el sabor de la mortadela, sobre una base cremosa y fresca de stracciatella.
- Focaccia vegetal: una opción ligera pero repleta de sabor, con verduras asadas, aceite de albahaca y un punto de sal que la hace irresistible.
- Focaccia de speck y burrata: contraste entre el toque ahumado del speck y la untuosidad de la burrata, que se funde sobre el pan caliente.
Cada una de estas focaccias puede disfrutarse como plato principal, como cena informal o como parte de un aperitivo italiano bien acompañado.
Maridajes con cócteles de autor
Uno de los grandes aciertos de Bello Bello es haber entendido que una buena comida se disfruta más con la bebida adecuada. Por eso, sus focaccias pueden acompañarse de vinos italianos seleccionados, vermuts especiados o, mejor aún, de su carta de cócteles en Santander, que fusiona clásicos y creaciones propias.
Una focaccia de mortadela con un negroni clásico. Una focaccia vegetal con un spritz ligero y afrutado. O una de speck y burrata con un amaretto sour. Las combinaciones son muchas, y todas están pensadas para redondear la experiencia.
Una visita obligada para los amantes del pan y la cocina italiana
Si te apasionan los sabores auténticos, el pan de verdad y las experiencias gastronómicas con personalidad, Bello Bello es una parada obligatoria. Ya sea para disfrutar de una comida diferente, para probar nuevos maridajes o simplemente para dejarte llevar por el aroma del horno, este restaurante promete dejar huella.
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