Ubicado en la calle San Simón, en pleno centro de Santander, el Restaurante Agua Salada se ha ganado un lugar destacado entre los amantes de la buena mesa. Este acogedor espacio familiar, de ambiente íntimo y decoración mediterránea, es ideal para quienes buscan una experiencia culinaria donde tradición y creatividad se encuentran.
Cocina de mercado con alma contemporánea
La propuesta gastronómica de Agua Salada parte de la cocina tradicional, pero no teme incorporar técnicas y sabores internacionales. Su carta, que varía según la temporada, se elabora con ingredientes frescos, locales y de calidad, con una clara vocación de respeto al producto.
Entre sus platos más celebrados se encuentran el tartar de atún con ajoblanco y helado de mostaza inglesa, una combinación atrevida y refrescante, y el carpaccio de pulpo con vinagreta de pistacho y lima, que ofrece una versión sofisticada del clásico pulpo a la gallega. Además, Agua Salada permite pedir medias raciones, una opción perfecta para quienes disfrutan probando diferentes sabores en una sola comida.
Distintivo MICHELIN y servicio cercano
La calidad y coherencia de su cocina han sido reconocidas con el distintivo Bib Gourmand de la Guía MICHELIN, que premia a los restaurantes que ofrecen excelente cocina a precios contenidos. Este reconocimiento subraya el equilibrio entre técnica, producto y precio, algo que Agua Salada maneja con naturalidad.
El trato cercano de Pilar y su equipo, siempre atentos a cada detalle, convierte cada visita en una experiencia cercana y personal. Ya sea para una comida tranquila o una cena especial. Restaurante Agua Salada es una apuesta segura para disfrutar de la gastronomía cántabra desde una mirada contemporánea. En uno de los rincones más acogedores del centro de Santander.
¡Gran descubrimiento! La comida es muy rica y variada, cada plato mejor que el anterior. Además, puedes pedir medias raciones para probar más opciones. ¡Genial!